La candela nocturna
Suenan las campanas
de San Salvador,
la Virgen María
parió ensin dolor.
—Levanta, José,
y enciende la vela,
mira a ver quién anda
por tu cabecera.
Son los angelinos
que van de carrera
y llevan al niño
vestido de seda.
—¿De quién es el niño?
—Es de María.
—¿Dónde está María?
—Está con José.
—¿Dónde está José?
—Está con San Pedro,
abriendo y cerrando
las puertas del cielo.
Resumen / Summary
Las campanas de San Salvador suenan para anunciar que la Virgen María ha dado a luz sin dolor. José enciende una vela y observa quién está junto a su cabecera: son los ángeles que llegan apresurados, llevando al niño vestido de seda. Al preguntar de quién es el niño, le responden que es de María, quien está junto a José, y que José, a su vez, se encuentra con San Pedro abriendo y cerrando las puertas del cielo.
The bells of San Salvador ring to announce that the Virgin Mary has given birth without pain. Joseph lights a candle and looks to see who is at his bedside: it is the angels, arriving in haste, carrying the child dressed in silk. When he asks whose child it is, they reply that he belongs to Mary, who is with Joseph, and that Joseph, in turn, is with Saint Peter, opening and closing the gates of heaven.
Comentario
Conocida bajo el título de La candela nocturna en otros lugares de España, Portugal e Hispanoamérica, la oración del alba que aquí presentamos se distingue por incluir una referencia explícita a las campanas de la catedral de San Salvador de Oviedo, rasgo que convierte a esta versión asturiana en un prototipo singular dentro de la tradición hispánica. Su difusión en la península ibérica se limita a las regiones cantábricas y pirenaicas (Asturias, País Vasco y Aragón), lo que apunta hacia el Camino de Santiago como posible vía de propagación a lo largo de la cornisa cantábrica.
Véase, como ejemplo representativo de la tradición aragonesa, la oración documentada en San Esteban de Litera (Huesca), según la edición de Agustín Faro Forteza (1990):


En representación de la tradición vasca, véase esta versión procedente de Durango (Vizcaya), publicada por José Miguel de Barandiarán en 1921:


Como antecedente directo de estas oraciones, el investigador José Manuel Pedrosa nos remite a una canción de raigambre medieval que aún pervivía a principios del siglo XX en la comunidad judeo-española de Sarajevo (Bosnia).

